Después de varios días de presión vendedora, el GBP/JPY ha conseguido romper su racha bajista y cerrar al alza, en un movimiento que muchos interpretan como una señal de alivio técnico. El rebote llega justo en una zona clave, alrededor de los 198 yenes por libra, donde los compradores parecen haber encontrado apoyo después de la corrección de la última semana. Este movimiento ha devuelto algo de optimismo a los operadores, aunque todavía reina la cautela.
El mercado se mueve en un contexto de alta volatilidad. Por un lado, el yen japonés ha perdido algo de tracción en los últimos días, tras las expectativas de que el Banco de Japón no actuará de forma tan agresiva como se había anticipado. Las especulaciones políticas en Tokio, junto con un tono más prudente en los mensajes del banco central, han provocado una ligera corrección del yen frente a las principales divisas.
Por otro lado, en el Reino Unido, los inversores están pendientes de los próximos informes laborales y de los salarios. Estos datos podrían ser determinantes para definir la hoja de ruta del Banco de Inglaterra. Si el mercado laboral muestra signos de debilidad, podría reabrirse la puerta a recortes de tipos antes de final de año, lo que pesaría sobre la libra. Sin embargo, si los datos sorprenden al alza, el BoE podría mantener su tono más restrictivo, fortaleciendo al GBP en el corto plazo.
El cruce GBP/JPY se encuentra ahora en una zona de equilibrio delicada. La resistencia más inmediata aparece en torno a los 199,50 yenes, mientras que el soporte principal sigue firme cerca de los 197,00. Una ruptura clara por encima de los 199,50 podría abrir la puerta a un nuevo impulso hacia el nivel psicológico de los 200,00 yenes, una barrera que el mercado no logra superar de forma sostenida desde finales del verano.
El interés en este par también está creciendo entre los traders minoristas, que ven oportunidades en los rangos actuales para aprovechar movimientos de corto plazo. No obstante, la volatilidad sigue siendo elevada, y las variaciones intradía pueden ser bruscas, sobre todo ante titulares relacionados con política monetaria o datos económicos imprevistos.
La clave en los próximos días estará en el tono que adopten tanto el Banco de Japón como el Banco de Inglaterra. Si el primero mantiene su política flexible mientras el segundo se muestra más firme contra la inflación, la libra podría seguir encontrando apoyo. Pero si el BoJ sorprende con un endurecimiento monetario mayor, el yen podría recuperar terreno rápidamente.
En definitiva, el GBP/JPY vive un momento de pausa tras semanas de presión bajista, pero aún no ha definido una dirección clara. El rebote técnico actual podría ser el preludio de una nueva fase alcista, siempre que los compradores logren mantener el control por encima de los 198 yenes. Los próximos datos macroeconómicos y las declaraciones de los bancos centrales marcarán el rumbo de un par que promete emociones fuertes esta semana.
