La economía suiza vuelve a dar señales de enfriamiento. El SECO ha confirmado que el crecimiento del país se mantendrá en niveles modestos en los próximos años, por debajo de la media histórica. Este panorama está empezando a preocupar a los inversores, ya que una economía con bajo dinamismo limita el margen de acción del Banco Nacional Suizo, que observa con inquietud cómo el franco se fortalece frente al dólar.
Por otro lado, el dólar estadounidense no consigue levantar cabeza. El cierre parcial del Gobierno sigue sin resolverse y la falta de consenso político en Washington está pasando factura al ánimo de los mercados. A esto se suma la firme expectativa de que la Reserva Federal recortará los tipos de interés en su reunión de octubre y probablemente también en diciembre, lo que debilita aún más la divisa norteamericana.
Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han aflojado ligeramente después de que ambas partes manifestaran su intención de retomar el diálogo. Sin embargo, la incertidumbre sigue siendo alta y los inversores continúan buscando refugio en monedas consideradas seguras, como el franco suizo o el yen japonés.
Desde el punto de vista del análisis técnico, el USD/CHF ha perdido un nivel psicológico clave: el 0,8000. Esta ruptura podría abrir la puerta a caídas adicionales si la presión sobre el dólar persiste. A corto plazo, el comportamiento del par dependerá de cómo evolucione la política monetaria en ambos países y de si el banco central suizo decide intervenir para frenar la apreciación de su moneda.
En definitiva, el cruce entre el dólar y el franco refleja un momento de debilidad general del billete verde frente a un entorno global de mayor cautela. Para los traders, este movimiento es una advertencia clara: el mercado está girando hacia activos de refugio, y el USD/CHF podría seguir ofreciendo oportunidades bajistas si las condiciones actuales se mantienen.

