Durante los últimos días, el par EUR/USD ha ido deslizándose hacia niveles más bajos, rondando el 1,1670 y tocando mínimos del mes. La tensión política en Francia, con la dificultad de formar un gobierno estable, ha vuelto a sacudir la confianza en la eurozona. Los mercados temen que la falta de claridad política acabe afectando al crecimiento europeo y, en consecuencia, a la estabilidad de la moneda única.
Mientras tanto, los inversores se mantienen atentos a las próximas declaraciones del Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal. Cualquier cambio en el tono de política monetaria podría mover bruscamente el par. En particular, si el BCE muestra una postura más prudente o reconoce debilidad en la economía, el euro podría volver a perder tracción frente a un dólar que sigue respaldado por un mercado laboral sólido y datos de inflación resistentes.
En el plano técnico, el panorama tampoco ayuda. El euro ha perdido su media móvil de 50 días, lo que suele interpretarse como una señal de vulnerabilidad. Además, cada intento de rebote se ve frenado rápidamente, confirmando que los vendedores dominan el mercado. Si el soporte de 1,1650 se rompe con fuerza, podría abrirse la puerta a una extensión bajista más profunda, con posibles objetivos en la zona de 1,1580.
Aun así, no todo es negativo. Algunos analistas creen que, si el sentimiento mejora y la política francesa se estabiliza, podría verse un rebote técnico hacia 1,1750 o incluso 1,18. Pero para que eso ocurra, el mercado necesita señales claras de confianza, algo que hoy escasea.
Para los traders, este es un momento que exige paciencia y disciplina. Las operaciones impulsivas pueden ser peligrosas cuando el mercado se mueve sin dirección firme. La clave está en esperar confirmaciones antes de abrir posiciones y ajustar bien los niveles de riesgo. Si el precio logra consolidarse por encima de 1,1750, el panorama podría cambiar; si, por el contrario, rompe con claridad los mínimos recientes, la tendencia bajista se consolidará.
En definitiva, el euro atraviesa un periodo de vulnerabilidad. Con los factores políticos, técnicos y de sentimiento en su contra, es probable que el mercado mantenga una postura defensiva en el corto plazo. La prudencia es la mejor aliada para quienes operan el par EUR/USD en estos días de incertidumbre.

